Evolución tecnológica y cibermedios
TÍTULO: EVOLUCIÓN TECNOLÓGICA Y CIBERMEDIOS
AUTOR: Cabrera, María Ángeles (Coords.)
EDITORIAL: Comunicación Social
Esta obra es fruto del trabajo colectivo de un grupo de profesores e investigadores expertos en nuevas tecnologías y medios de comunicación, que participan, en su mayoría, en un proyecto de mayor envergadura sobre la evolución de los cibermedios en España1, desde un análisis multifocal y centrado en los cambios acontecidos en los últimos años. Estos cambios tecnológicos o evolución van más allá de la aparición de nuevos dispositivos. La evolución tecnológica ha modificado sustancialmente el trabajo que desempeñan los profesionales de la información y ha variado los hábitos de consumo de medios por parte de los usuarios.
Pero, ¿hacia dónde llevan todos estos cambios? A lo largo de sus páginas, las distintas aportaciones de los autores tratan de dilucidar -con un minucioso análisis del presente- el futuro de la empresa de comunicación, de los formatos y dispositivos de recepción, del trabajo del periodista, asó como de la audiencia y la sociedad en general.
El libro plantea la reestructuración de las redacciones como efecto inmediato de la evolución tecnológica. La mayor parte de las empresas de comunicación han reubicado los puestos de los redactores, tratando de adaptarse a las nuevas oportunidades de la convergencia digital. En otros casos, se ha separado físicamente el área dedicada al contenido web del resto de la redacción. Existen indicios que apuntan a la convergencia como el resultado natural de la evolución de los medios dentro de la cual, nace la figura del periodista como ‘arquitecto de la información’, capaz de conjugar distintas funciones y de crear un producto informativo que pueda ser difundido en diferentes formatos.
Otro efecto de esta evolución es que el trabajo del periodista no encuentra limitaciones, ni se restringe a las cuatro paredes de la redacción y al puesto fijo de mesa y teléfono. Se vislumbra un periodismo escrito móvil, que es capaz de transmitir las primeras declaraciones desde el lugar de los hechos; algo que se le atribuía a las conexiones en directo de la radio y la televisión, pero que ahora es capaz de recoger minuto a minuto el periodista para la web del medio. Este hecho también modifica la percepción de la audiencia y su consumo de información; la tecnología actual pone a su disposición un volumen considerable de canales, que obliga al medio a captar su atención durante un tiempo superior al de la competencia; circunstancia que pone a prueba la capacidad creativa del profesional a la hora de hacer un trabajo lo suficientemente atractivo como para cautivar a la audiencia.
Este libro también aborda temas como los blogs o bitácoras, el periodismo ciudadano y la participación de las audiencias a través de los medios y de las redes sociales. Para la mayoría de los periodistas, los blogs o bitácoras de los usuarios, así como las redes sociales son espacios en los que se puede encontrar información más o menos fidedigna sobre alguna materia de interés para la sociedad. Los expertos alertan de la conveniencia de tener en cuenta que este tipo de informaciones son aportaciones individuales, que recogen el punto de vista de su autor, en este caso usuario, y que por tanto, se diferencia claramente del trabajo del profesional de la información.
No obstante, el periodismo ciudadano y la mayor influencia o participación de los usuarios en los contenidos de los medios tiene su origen en los blogs de autor, o en las secciones que el medio habilita en su página web para recoger las opiniones de sus lectores. En esta obra se aborda la conveniencia o no de tratar este fenómeno como periodismo, dotarlo de cierta identidad, o si es mejor diferenciar entre el trabajo del profesional, que se debe ceñir a unos principios y estándares de calidad, y las aportaciones de los ciudadanos, que son libres de interpretar la realidad y no tienen que estar sujetos a los principios de veracidad que se le exige al periodista.
Por último, una de las herramientas que ha irrumpido con fuerza en el escenario mediático es el móvil. Su aportación a los medios de comunicación y la industria del entretenimiento en general resultan difíciles de valorar, ya que las aplicaciones y el software de los distintos modelos crecen a un ritmo exponencial. España es uno de los países punteros en el consumo de internet a través del móvil. Consultar el correo electrónico y las noticias de última hora son dos de las principales funciones demandadas por los usuarios. Desde el punto de vista profesional, el periodista es cada día más independiente, pero también está obligado a reinventarse para responder a las exigencias de los nuevos tiempos y adaptarse a las actualizaciones permanentes de la tecnología disponible.
En el lado de los inconvenientes en cuanto al uso del móvil como nueva herramienta, los autores resaltan que existe una multitud de operadores, formatos y programas o software para cada dispositivo movil que resultan incompatibles con otros. Además, los usuarios demandan que las páginas web se adecuen a la pantalla del móvil para que resulte más fácil navegar por ellas. A todo lo anterior hay que sumar los altos precios que las operadoras de telefonía imponen para la conexión a internet desde el dispositivo móvil, y de modo particular en España.
Tras la lectura de este trabajo, se concluyen ideas tan sugerentes como que la evolución tecnológica debe llevarnos a tomar decisiones dentro de un marco empresarial global, pero desde una perspectiva particular, que no aleje la realidad de los cibermedios de la labor que desempeña el periodista y que debe tener en cuenta a sus audiencias, no sólo como consumidoras o receptoras de los mensajes y contenidos informativos, sino como sujetos activos y participativos de los nuevos medios de comunicación del siglo XXI.
lunes, 25 de abril de 2011
domingo, 24 de abril de 2011
El periodismo digital del siglo XXI se parece mucho al periodismo del siglo XIX
“Se está regresando a la práctica de poner todos los datos esenciales en los primeros párrafos de una noticia”: Juan Carlos Pérez Salazar.
El editor de BBC de Londres orientó un seminario teórico-práctico para los estudiantes de periodismo digital de EAFIT, en el segundo semestre del año pasado. Uno de los editores de noticias de BBC Mundo, el portal en español de BBC de Londres, hablará de esta particular situación este jueves, a las 10 a.m., en el auditorio 38-125 de EAFIT. Invitado por el pregrado en Comunicación Social, Juan Carlos Pérez Salazar analizará por qué el periodismo más moderno que se hace hoy se parece tanto al de hacía 100 años atrás.
Por Redacción Bitácora
bitacora@eafit.edu.co
¡Qué paradoja! Internet, la tecnología que revolucionó la información y las comunicaciones en todo el planeta, la que hizo realidad la “aldea global” que pregonó Marshall McLuhan en los años 60, está llevando al más vanguardista periodismo a tener algunas de las formas típicas que tuvo durante el siglo XIX y principios del XX.
Es como si la moderna red, la más visible de las llamadas “nuevas tecnologías”, lo hubiera devuelto en el tiempo.
“Hay un regreso a los titulares largos, a la pirámide invertida, a la proliferación y desaparición constante de medios de comunicación y, más alarmante aún, a una atenuación –y en algunos casos casi desaparición– de la frontera entre opinión e información. Todos estos eran fenómenos que se habían visto en el periodismo anglosajón del siglo XIX y, más específicamente, de la Revolución Industrial”, explica Juan Carlos Pérez Salazar.
Este periodista colombiano, editor de noticias de la prestigiosa BBC de Londres en su portal BBC Mundo, empezó a considerar algunas hipótesis al respecto a partir de su trabajo en ese servicio informativo, considerado por muchos como el de mayor credibilidad a nivel internacional.
Sin embargo, esas ideas las cristalizó luego de escuchar una entrevista con Timothy Garton-Ash, un historiador inglés que se dio a conocer por su cubrimiento y análisis de las llamadas “revoluciones de terciopelo”, aquellas que se dieron como un ‘efecto dominó’ a finales de los años 80 del siglo XX en los países de Europa del Este y que tienen como su símbolo más fuerte la caída del Muro de Berlín.
“En esa entrevista –explica Pérez Salazar–, Garton-Ash decía que lo que observa a nivel geopolítico en el mundo de hoy es una especie de retorno a los imperios del siglo XIX. Según él, en la actualidad estamos volviendo a una realidad geopolítica de imperios”.
“No sólo Estados Unidos, que desde el fin de la Guerra Fría prevaleció sobre un mundo unipolar, sino del dramático crecimiento de China y de poderes regionales como India, Rusia y Brasil, que efectivamente están empezando a actuar como imperios a nivel económico e incluso militar en su esfera de influencia. Lo peculiar es que ese retorno se da también en el periodismo”.
LOS CASOS CONCRETOS
Para Juan Carlos Pérez, el ejemplo más claro se esa vuelta a formas clásicas del periodismo de hace más de un siglo está en los titulares. “Ustedes habrán notado –dice– que en los sitios de noticias de Internet los titulares son cada vez más largos y explícitos. Periodísticamente, esto es un regreso en el tiempo, pues la tendencia era a títulos cortos e impactantes”.
Explica que la razón es muy sencilla: cómo el 65% de los internautas utiliza Google, entre otras herramientas para buscar información, un titular debe tener todas las palabras claves para que pueda ser fácilmente ubicable por el buscador.
Lo mismo ocurre con el regreso a la llamada “pirámide invertida”, que es aquella forma de redacción de las noticias en la cual en los primeros párrafos se responde qué pasó, quién participó en el acontecimiento noticioso, cuándo ocurrió, dónde, cómo y por qué.
“La pirámide invertida empezó a surgir como respuesta al invento del telégrafo en 1840. Como era tan costoso transmitir por ese sistema, los periodistas empezaron a escribir lo esencial de una noticia al principio. Luego le agregaban detalles. Esto empezó a usarse de manera intensa durante la guerra civil estadounidense y se consolidó con las agencias de noticias que escribían de esa manera –la mayoría todavía lo hacen– para que los editores cortaran (o caparan, como decimos en Colombia) lo que quisieran de acuerdo con el espacio del que dispusieran”.
Sin embargo, en la segunda parte del siglo XX esa forma de escritura empezó a entrar en desuso porque se quería una redacción menos aburrida, predecible y constreñida. Los medios escritos se fueron alejando de ese corsé tan estrecho, sin dejar de lado el rigor periodístico. “Pues bien, ahora se está regresando a la práctica de poner todos los datos esenciales en los primeros párrafos de una noticia”, comenta Pérez.
Eso se debe también a un adelanto tecnológico: muchas personas están ingresando a las páginas de noticias en Internet a través de teléfonos celulares, Blackberrys, iPads y Kindles. “Y tanto por el tiempo de que disponen para leer como por el formato de estos artilugios, solo leen los primeros párrafos donde, por lo tanto, debe concentrarse toda la información esencial”, afirma el periodista.
LA OPINIÓN COMO SI FUERA INFORMACIÓN
Para el invitado este jueves a EAFIT, la más preocupante de las similitudes entre lo que ocurre ahora y lo que ocurría en el Siglo XIX es la poca separación entre información y opinión dentro de las publicaciones digitales.
“Todos los que estudiamos periodismo y comunicación recordamos cuando nos decían que uno de los grandes logros del periodismo moderno fue la separación entre información y opinión”.
“En el siglo XX, los medios que más se destacaron y más influencia tuvieron fueron los que hicieron de la imparcialidad y la independencia sus banderas, como el New York Times, la BBC, el New Yorker o El Espectador aquí en Colombia. Lo que observo en los últimos años es un regreso a los medios que toman partido y a desdibujar la frontera entre información y opinión”.
Los ejemplos que da Juan Carlos Pérez de este fenómeno van desde Colombia hasta Estados Unidos, desde grandes cadenas de televisión hasta simples blogs de aficionados que apenas llegan al mundo digital y que publican en forma desaforada todo lo que ven y piensan.
Aún así, cree que en el futuro, a pesar de toda esta proliferación de medios, de puntos de vista individuales, de chismes, de manipulación, “va a llegar un momento de saturación en el que los cibernautas van a remitirse a los medios con recorrido y prestigio, en los que haya editores y periodistas que les digan: ¡miren, esto es lo que vale la pena!”.
Y ahí, cree, se volverá a las bases del periodismo moderno, aquel que fue determinante durante buena parte del siglo XX para ayudar a consolidar la democracia y a mantener ciudadanos bien informados para que tuvieran criterios al momento de tomar sus decisiones como actores sociales.
Un periodismo como el que todos reclaman a diario, basado en información manejada con responsabilidad, seriedad, credibilidad y sentido del bien común.
miércoles, 20 de abril de 2011
sábado, 9 de abril de 2011
Los periodistas no pueden renunciar a ser intérpretes de su mundo
Pregrado en Comunicación Social de la Universidad EAFIT (Colombia)
Esa fue una de las conclusiones del foro “Wikileaks y la responsabilidad de las fuentes periodísticas” que analizó en EAFIT el impacto que tiene sobre el periodismo la manera en que esa organización filtra documentos sobre temas sensibles a nivel internacional.
El evento se constituyó en el acto académico con el cual se presentó en Medellín el Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar, al cual asistieron varios miembros del jurado. Fue realizado en forma conjunta por la organización del premio y por el pregrado en Comunicación Social.
Más información en El fenómeno Wikileaks replantea la manera de informar
Los panelistas replantearon el papel del periodismo y la labor del periodista como intérprete de la realidad y como analista de la información. Wikileaks es una organización sin ánimo de lucro que publica a través de su sitio web informes anónimos y documentos filtrados con contenido sensible en materia de interés público.
Con Wikileaks “se quebraron las barreras, se quebraron los filtros sobre quien muestra que se debe leer o ver”, expresó Maria Elvira Bonilla, directora del sitio web Kien & Ke. / Foto Lina Arroyave
.
En el foro se debatió sobre la influencia de este portal de información respecto al poder, que en parte busca entender sus secretos y que los ciudadanos de alguna manera se acerquen a él. / Foto Lina Arroyave
El diplomático Mario Galofre (a la derecha) planteó la discusión en torno a la ética en el manejo de la información y la legitimidad que tiene Wikileaks. / Foto Lina Arroyave
.
Beatriz Helena Mejía, gerente del periódico La Tarde de Pereira, no le da la connotación de “cataclismo” en el periodismo al fenómeno Wikileaks. La periodista afirmó que ha traído información que no se conocía, llegando a ser una fuente más de la labor periodística. /Foto Lina Arroyave
Pregrado en Comunicación Social de la Universidad EAFIT (Colombia)
Esa fue una de las conclusiones del foro “Wikileaks y la responsabilidad de las fuentes periodísticas” que analizó en EAFIT el impacto que tiene sobre el periodismo la manera en que esa organización filtra documentos sobre temas sensibles a nivel internacional.
El evento se constituyó en el acto académico con el cual se presentó en Medellín el Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar, al cual asistieron varios miembros del jurado. Fue realizado en forma conjunta por la organización del premio y por el pregrado en Comunicación Social.
Más información en El fenómeno Wikileaks replantea la manera de informar
Los panelistas replantearon el papel del periodismo y la labor del periodista como intérprete de la realidad y como analista de la información. Wikileaks es una organización sin ánimo de lucro que publica a través de su sitio web informes anónimos y documentos filtrados con contenido sensible en materia de interés público.
Con Wikileaks “se quebraron las barreras, se quebraron los filtros sobre quien muestra que se debe leer o ver”, expresó Maria Elvira Bonilla, directora del sitio web Kien & Ke. / Foto Lina Arroyave
.
En el foro se debatió sobre la influencia de este portal de información respecto al poder, que en parte busca entender sus secretos y que los ciudadanos de alguna manera se acerquen a él. / Foto Lina Arroyave
El diplomático Mario Galofre (a la derecha) planteó la discusión en torno a la ética en el manejo de la información y la legitimidad que tiene Wikileaks. / Foto Lina Arroyave
.
Beatriz Helena Mejía, gerente del periódico La Tarde de Pereira, no le da la connotación de “cataclismo” en el periodismo al fenómeno Wikileaks. La periodista afirmó que ha traído información que no se conocía, llegando a ser una fuente más de la labor periodística. /Foto Lina Arroyave
miércoles, 6 de abril de 2011
lunes, 4 de abril de 2011
UN MODELO DE SALA DE PRENSA VIRTUAL
Publicado por Johanna Heredia, alumna egresada escuela de Comunicación y Publicidad. UDA.
Tal como lo manifestó Alvin Toffler, en su libro “La Tercera Ola”, hemos atravesado la Revolución Agrícola, la Revolución Industrial para, desde 1955, dar inicio a la Revolución Informática. En esta publicación, realizada en 1979, Toffler ya vaticinaba un cambio en el manejo y distribución del capital correspondiente a esta era: La información.
Luego de haber hablado de agricultura e industria, vemos a una sociedad que ha incluido en su léxico términos como: computadora, web, internet, telecomunicación, tecnología, palabras que hace un siglo, no existían. Una sociedad que asegura que la información es la nueva base de la economía deberá ser entendida de diferente manera, desde cada individuo y cada organización.
Las empresas forman parte de un sistema que responde a la incesante búsqueda del hombre por adquirir información; por ello, es claro que la organización no puede existir aislada, tendrá que entenderse como un sistema que interactúa, tanto internamente como externamente. Podemos ver a la organización como una sociedad en un nivel más micro; así, podemos decir que existe un micro Sociedad de la Información dentro de cada organización.
Determinar el papel que cumple una organización dentro de la sociedad permitirá, internamente, trazar el camino a seguir, y, externamente, marcar una diferenciación evidente con la competencia.Por ello, el correcto manejo de la imagen corporativa permitirá que una organización reconozca y aproveche su especificidad en el mercado.
La construcción de una imagen corporativa sólida no solo dependerá de la empresa, sino de los diferentes públicos que la integran. Los medios de comunicación, por ejemplo, son los encargados de generar la opinión pública que, directa o indirectamente, influencia a los diferentes miembros de una sociedad.
El relacionista público es una pieza importante en este proceso comunicativo entre Medios de Comunicación – Individuo, pues es el encargado de facilitar la información de la empresa, desarrollando una “dependencia recíproca”, en la que se benefician ambas partes: el periodista, al contar con material para la elaboración de sus notas, y la organización, que, a través de esta información, podrá enviar mensajes que fortalezcan su imagen corporativa.
Hoy en día, el relacionista público, a más de proveer información, deberá enfrentar los cambios que representan pertenecer a la Sociedad de la Información y dotar al periodista de herramientas integradas en las nuevas tecnologías, que supone la Revolución Digital.
La propuesta de una Sala de Prensa Virtual, en donde se concentre toda la información de una empresa, permite el acceso del periodista a un banco de noticias permanente, en el que puede descargar todo el material necesario para la elaboración de una nota: documentos en Word, Excel y Power Point, fotografías en diferentes resoluciones, clips de audio y de video, además de los elementos gráficos de la imagen corporativa, como logotipo y Manual de Imagen.Este modelo también incluye una sección en donde se publica la agenda de ruedas de prensa, con fecha, tema, participantes, acompañada del boletín respectivo, que podrá descargar directamente.
En el Ecuador, se ha visto un desarrollo en las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC’s). A partir de la creación de la Ley Orgánica de Transparencia y Acceso a la Información Pública (LOTAIP), en el 2004, las entidades públicas debían garantizar el acceso a la información y la transparencia de la información. Desde este momento, el interés de estas organizaciones por comunicar, a través de sus páginas web, no solo estaba justificado en el cumplimiento de la LOTAIP, sino que fue transformándose en una oportunidad para publicar noticias que promuevan el apoyo de la ciudadanía al Gobierno. Tal es el caso de las páginas web del Servicio de Rentas Internas, Correos del Ecuador y Asamblea Nacional que han incorporado la sección de “Sala de Prensa”, destinada a la publicación de noticias generadas internamente, por la institución, como externamente, por los medios de comunicación. Estos modelos ofrecen al visitante un vistazo a la información, mas no permiten la descarga completa de archivos multimedia, limitando la labor periodística al no proveer imágenes, clips de audio y video que faciliten la elaboración de una nota más completa
LA MANCHETA: CLAVE DEL PERIODISMO DE OPINIÓN
Por: Yusnely Graterol Martínez
María López Rodríguez
La mancheta es un género del periodismo de opinión que sintetiza en pocas palabras, la posición editorial de los medios impresos que la utilizan. Tiene sus orígenes en Francia, país en el que tuvo un gran desarrollo y en donde hoy constituye una herramienta esencial en las páginas de importantes rotativos como “Le Monde”. La relevancia de este género opinativo radica, en que permite, valiéndose de la ironía, el humor y compromiso social, editorializar situaciones de la realidad nacional e internacional en una frase muy breve, cuyo texto informativo es desarrollado posteriormente en las páginas internas del medio de comunicación.
Representa un género que despierta el interés de los lectores, pues permite mediante una oración redactada con aparente sencillez, presentar un juicio de valor sobre asuntos complejos, y constituye una fuente de investigación para el área de la Comunicación Social.
Existen varias indagaciones en Venezuela, sobre investigaciones académicas acerca de esta forma de hacer Periodismo de Opinión, donde se expresa claramente que para hacer una buena mancheta, primero hay que seleccionar el hecho o problema que será motivo de la misma; luego buscar la frase, la palabra o expresión que resuma la opinión que impacte al lector y provoque en él la reacción sobre el tópico tratado. También expone que desde las citas bíblicas o versos populares, le sirven al autor para comunicarse con el público. Frases históricas, refranes, expresiones del argot deportivo, todo es válido en función de decir mucho con pocas palabras en forma atractiva e impactante.
La mancheta es un género importante que causa gran impacto, sin embargo, las autoras de esta investigación consideran que es poca la atención recibida en diarios venezolanos. Incluso, son escasos los estudios universitarios al respecto. Uno de los pocos trabajos que desarrolla aspectos de la mancheta, es el realizado por la periodista Ybeyise Pacheco Martini, que fue presentado como tesis de grado para optar al título de Licenciada en Comunicación Social, el mismo llevó como epígrafe “Análisis del lenguaje de la mancheta de El Nacional, durante el período 1958-1983”.
Como se expuso anteriormente, son pocos los periódicos que usan esta forma editorial. Earle Herrera en su obra Periodismo de Opinión: Los fuegos cotidianos. manifiesta de forma jocosa que “la mancheta no tiene quien le escriba”, haciendo alusión al libro “El Coronel no tiene quien le escriba”, del colombiano Gabriel García Márquez
Desde que apareció el primer número de El Nacional, el 3 de agosto de 1943, se publicó una mancheta, pero Herrera, indica que nadie se atrevió a definirla como categoría periodística, pues no le daban el rango, era una frase ingeniosa que refrescaba la sesuda sección de largos artículos y columnas sabihondas.
Con el pasar del tiempo la mancheta se consolidó en El Nacional, pero el ejemplo no fue emulado por otros diarios, solamente el 2001, y eventualmente las usaba El Mundo. A pesar de la falta de interés, los rotativos que aún la publican, han estado alerta para fijar posición sobre temas de gran relevancia, pero sobre todo al gobierno, la política y que ayudan a formar una opinión en el lector dejando que éste se forme sus propios juicios de valor.
Esta variante editorial ha contribuido desde su concepción al desarrollo del periodismo de opinión en Venezuela, porque hace uso de características como el humor, la ironía y la sátira con mucho profesionalismo, para resumir en una frase muy corta, un hecho de gran trascendencia en el ámbito nacional e internacional, que busca de alguna manera orientar al lector sobre temas de interés y ayudándolo a formarse su propia opinión sin influir en ella.
Para las investigadoras, la presente indagación redundará en beneficios para el periodismo venezolano, tomando en consideración que son pocas los trabajos universitarios realizados sobre el uso de la mancheta como género de opinión.
Además, se consideró importante que en Venezuela se deban realizar investigaciones educativas que incorporen temas poco abordados, como es el caso de la mancheta. Este estudio aportará recomendaciones que puedan ser usadas en las cátedras de periodismo de opinión, sobre el uso de la misma como género opinativo editorializante, permitiendo así el desarrollo y el interés de profesores y estudiantes al respecto.
También, con esta búsqueda se pretendió obtener resultados que sean útiles para los profesionales que se dedican al Periodismo de Opinión, de modo que puedan valorar a la mancheta como un mecanismo acertado para llevar mensajes a la población y como eficaz instrumento de embate para la actual situación política que vive la sociedad venezolana.
La relevancia de este género de opinión radica precisamente en el buen manejo que hace de los tópicos de carácter político, reflejado específicamente en el jefe de Estado u otras figuras del Gobierno, valiéndose de los recursos antes mencionados
En este orden de ideas, los resultados de este estudio podrán contribuir a formar un marco referencial para otras instituciones que ofrezcan esta carrera o que estén desarrollando experiencia en el campo de las Ciencias Sociales
Por: Yusnely Graterol Martínez
María López Rodríguez
La mancheta es un género del periodismo de opinión que sintetiza en pocas palabras, la posición editorial de los medios impresos que la utilizan. Tiene sus orígenes en Francia, país en el que tuvo un gran desarrollo y en donde hoy constituye una herramienta esencial en las páginas de importantes rotativos como “Le Monde”. La relevancia de este género opinativo radica, en que permite, valiéndose de la ironía, el humor y compromiso social, editorializar situaciones de la realidad nacional e internacional en una frase muy breve, cuyo texto informativo es desarrollado posteriormente en las páginas internas del medio de comunicación.
Representa un género que despierta el interés de los lectores, pues permite mediante una oración redactada con aparente sencillez, presentar un juicio de valor sobre asuntos complejos, y constituye una fuente de investigación para el área de la Comunicación Social.
Existen varias indagaciones en Venezuela, sobre investigaciones académicas acerca de esta forma de hacer Periodismo de Opinión, donde se expresa claramente que para hacer una buena mancheta, primero hay que seleccionar el hecho o problema que será motivo de la misma; luego buscar la frase, la palabra o expresión que resuma la opinión que impacte al lector y provoque en él la reacción sobre el tópico tratado. También expone que desde las citas bíblicas o versos populares, le sirven al autor para comunicarse con el público. Frases históricas, refranes, expresiones del argot deportivo, todo es válido en función de decir mucho con pocas palabras en forma atractiva e impactante.
La mancheta es un género importante que causa gran impacto, sin embargo, las autoras de esta investigación consideran que es poca la atención recibida en diarios venezolanos. Incluso, son escasos los estudios universitarios al respecto. Uno de los pocos trabajos que desarrolla aspectos de la mancheta, es el realizado por la periodista Ybeyise Pacheco Martini, que fue presentado como tesis de grado para optar al título de Licenciada en Comunicación Social, el mismo llevó como epígrafe “Análisis del lenguaje de la mancheta de El Nacional, durante el período 1958-1983”.
Como se expuso anteriormente, son pocos los periódicos que usan esta forma editorial. Earle Herrera en su obra Periodismo de Opinión: Los fuegos cotidianos. manifiesta de forma jocosa que “la mancheta no tiene quien le escriba”, haciendo alusión al libro “El Coronel no tiene quien le escriba”, del colombiano Gabriel García Márquez
Desde que apareció el primer número de El Nacional, el 3 de agosto de 1943, se publicó una mancheta, pero Herrera, indica que nadie se atrevió a definirla como categoría periodística, pues no le daban el rango, era una frase ingeniosa que refrescaba la sesuda sección de largos artículos y columnas sabihondas.
Con el pasar del tiempo la mancheta se consolidó en El Nacional, pero el ejemplo no fue emulado por otros diarios, solamente el 2001, y eventualmente las usaba El Mundo. A pesar de la falta de interés, los rotativos que aún la publican, han estado alerta para fijar posición sobre temas de gran relevancia, pero sobre todo al gobierno, la política y que ayudan a formar una opinión en el lector dejando que éste se forme sus propios juicios de valor.
Esta variante editorial ha contribuido desde su concepción al desarrollo del periodismo de opinión en Venezuela, porque hace uso de características como el humor, la ironía y la sátira con mucho profesionalismo, para resumir en una frase muy corta, un hecho de gran trascendencia en el ámbito nacional e internacional, que busca de alguna manera orientar al lector sobre temas de interés y ayudándolo a formarse su propia opinión sin influir en ella.
Para las investigadoras, la presente indagación redundará en beneficios para el periodismo venezolano, tomando en consideración que son pocas los trabajos universitarios realizados sobre el uso de la mancheta como género de opinión.
Además, se consideró importante que en Venezuela se deban realizar investigaciones educativas que incorporen temas poco abordados, como es el caso de la mancheta. Este estudio aportará recomendaciones que puedan ser usadas en las cátedras de periodismo de opinión, sobre el uso de la misma como género opinativo editorializante, permitiendo así el desarrollo y el interés de profesores y estudiantes al respecto.
También, con esta búsqueda se pretendió obtener resultados que sean útiles para los profesionales que se dedican al Periodismo de Opinión, de modo que puedan valorar a la mancheta como un mecanismo acertado para llevar mensajes a la población y como eficaz instrumento de embate para la actual situación política que vive la sociedad venezolana.
La relevancia de este género de opinión radica precisamente en el buen manejo que hace de los tópicos de carácter político, reflejado específicamente en el jefe de Estado u otras figuras del Gobierno, valiéndose de los recursos antes mencionados
En este orden de ideas, los resultados de este estudio podrán contribuir a formar un marco referencial para otras instituciones que ofrezcan esta carrera o que estén desarrollando experiencia en el campo de las Ciencias Sociales
Suscribirse a:
Entradas (Atom)